Hay cicatrices que nadie las ve y gritos que no hacen ruido




IRA, TRISTEZA, AGOTAMIENTO FÍSICO y PSICOLÓGICO, PESADILLAS... Las personas LASTIMADAS por el IMPACTO de un TRAUMA, un ABANDONO o un evento ADVERSO avanzan por el mundo con un DOLOR INVISIBLE, PROFUNDO y DESCARNADO. Dar el paso en busca de AYUDA es algo NECESARIO.

Las personas LASTIMADAS pasan a menudo DESAPERCIBIDAS. NADIE APRECIA sus partes ROTAS NI su DOLOR INVISIBLE. Sin embargo, la marca de los traumas, de las adversidades vividas siguen impresas en sus MENTES DIFICULTANDO su DÍA a DÍA. Duermen mal, se sienten AGOTADAS, ENFADADAS, DECEPCIONADAS, VULNERABLES, TIENEN serias dificultades para volver a confiar en la gente y son incapaces de manejar esa REALIDAD INTERNA.

Las PERSONAS LASTIMADAS NO tienen NINGÚN HUESO ROTO y, sin embargo, NO pueden desenvolverse por el mundo con NORMALIDAD. Sus HERIDAS tampoco se APRECIAN a simple VISTA, pero su dolor es INMENSO, DESCARNADO y PROFUNDO. NADIE MERECE VIVIR de este MODO. Por ello, es necesario recordar siempre que es posible emerger de estas situaciones.  LAS PERSONAS LASTIMADAS tienen a su alcance adecuados recursos para reconstruir su FORTALEZA, su DIGNIDAD y VALOR. No es un proceso rápido ni sencillo. Re interpretar los eventos traumáticos implica movilizar emociones.

Significa por encima de todo, tener las fuerzas suficientes como para ser responsables de nuestro resurgir, de nuestra mejora y avance. Posicionarnos de nuevo en el mundo llevará tiempo, pero podemos lograrlo.

ALGÚN DÍA alguien te ABRAZARÁ tan FUERTE que todas tus PARTES ROTAS se unirán de NUEVO, te recompondrás de tus PESARES y volverás a SENTIRTE BIEN CONTIGO. 

Publicar un comentario

0 Comentarios