Tú decides que ser, bambú oh roble



En tiempos de tormenta, cuando los vientos soplan muy fuerte, el único que sobrevive a tal desastre natural es el bambú, ya que el roble es muy duro para soportar la tormenta.

El bambú, con su gran flexibilidad soporta toda tormenta, se mueve y dobla en armonía, hacia donde los vientos se dirijan; y el roble, como es tan duro, está tan estático que en vez de doblarse se quiebra, trata de resistir, de imponerse ante la tormenta, hasta que tarde o temprano cede.

Pasada la tormenta, el único que queda de pie es el bambú, delgado y flexible, listo para soportar otra tormenta.

En tu vida, considera cada problema como una tormenta, y decide si te comportas como un bambú o como un roble.

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