Podemos decir que vivimos bendecidos, en esos momentos cuando nuestros corazones están conscientes de nuestros tesoros.. Y mí gran tesoro es mí familia, y por ellos doy las gracias, porque son mí alegría, mí motivación diaria, mí felicidad de ser parte de sus vidas. Seamos agradecidos con las personas que nos hacen felices; ellos son los encantadores jardineros que hacen florecer nuestra alma.
Aprende a reflexionar y da las gracias sobre tus bendiciones presentes, de las cuales cada persona tiene un montón; no en tus desgracias pasadas de las cuales todos los hombres tienen alguna.
Ser agradecido no es una oración que haces antes de cada comida, Es una manera de vivir.
Dios Bendiga tu vida, tu familia, y tu mesa, doy las gracias porque siempre me acompañas en este rinconcito de mí alma.🤗😍
0 Comentarios